La medida pretende aliviar a los cavistas de la grave situación provocada por el coronavirus.
Luis Ibañez.
Los viticultores de Requena que producen uvas para cavas y las bodegas no tendrán que abonar a la Denominación de Origen Cava las cuotas correspondientes al primer trimestre de este año.
Conscientes de la gravedad de la crisis sanitaria y económica provocada por la pandemia del coronavirus Covid-19, la denominación de origen Cava, a propuesta de su presidente, Javier Pagés, ha adoptado las primeras medidas para dar respuesta a la nueva situación.
“Entre todos debemos ayudarnos en situaciones difíciles como ésta, remar en la misma dirección y apoyarnos los unos en los otros para superarlo”, afirma Pagés.
La primera iniciativa de urgencia adoptada por la DO Cava para contribuir a paliar, en la medida de lo posible, la delicada situación por la que atraviesan las bodegas, es la suspensión del cobro de las cuotas a los cavistas del primer trimestre de 2020, que debían ingresarse este próximos mes de abril.
La DO mantendrá “la calidad de los servicios que garantizan la distinción de sus productos, con la voluntad de seguir trabajando para ofrecerlos sin interrupción” afirman desde el organismo. “Es difícil cuantificar- agregan- el porcentaje de ventas afectadas, pero se mantendrán también los esfuerzos a nivel promocional adaptados a la nueva realidad que vivimos”.
Es el momento de “seguir apostando en la confianza de los consumidores en un producto tradicional e histórico como es el Cava, centrados en la fuerza de una marca de Denominación de Origen” destacan las fuentes.
Próximamente “se anunciarán nuevas medidas para hacer frente a los efectos del Covid-19” han avanzado desde el organismo que vela por la calidad de los cavas.