LUIS IBÁÑEZ.
En la tarde de ayer se formó una tormenta en el término municipal de Camporrobles que a medida que se fue desplazando hacia el este fue ganando intensidad. Cuando llegó a la parte nordeste del municipio de Requena fue cuando el fenómeno atmosférico ganó mayor intensidad.
La tormenta descargó gran cantidad de piedra en las pedanías requenenses del Pontón y la Portera, causando importantes daños en los viñedos y en menor medida en otros cultivos.
A los agricultores afectados les ha causado gran indignación, no solo las pérdidas en sus cosechas, sino el hecho de que el pedrisco se haya producido cuando faltaban pocos días para la vendimia.
En las zonas donde más llovió se llegaron a recoger más de 30 litros de agua por metro cuadrado.